Lubian
Ver mapa de Municipios :: Sanabria y Carballeda
No lo tenían fácil aquellos segadores gallegos que para llegar a los trigales castellanos debían atravesar Lubián, tampoco los arrieros, ni los peregrinos que se afanaban en sentido contrario para dar con sus pasos en Santiago. Y es que este municipio tiene como entrada y salida naturales sendos puertos de montaña: las portillas o “portelas” (como se denominan en estas tierras de influjo gallego) de Padornelo y La Canda.
Antaño de complicado acceso, hoy la autopista A-52 nos acerca a estos pueblos fronterizos de la Alta Sanabria, de exuberante vegetación y encaramados al borde de la montaña. Os recomendamos dejaros embelesar por el dulce acento de sus gentes, por su cálida acogida, que seguro recibiréis en cualquiera de sus establecimientos de turismo rural, y por las mil sensaciones que impregnarán vuestros sentidos.El agua es la seña de identidad de estas tierras: en sus ríos, fuentes, molinos, manantiales y torrenteras que, en ocasiones, atraviesan los caminos, alimento del deslumbrante verde de sus prados y blanco manto en los inviernos. Sus montañas verticales, colindantes con la provincia de Orense, acogen en su seno a los cinco pueblos que componen el ayuntamiento:
Comenzaremos por Padornelo, paso natural desde la Meseta. En esta población de sólidas casas de granito para protegerse de los rigores del invierno os encontraréis con una antigua cruz de piedra que probablemente delimitaba antaño el territorio. Aquí podréis encontraros con los caminantes del Camino de Santiago que recorren el último tramo antes de adentrarse en tierras gallegas.
El desnivel sobre el que se asienta Aciberos favorece la proliferación de molinos, que aprovechaban la fuerza del agua. Actualmente en el centro del pueblo se puede admirar uno de estos ingenios restaurado. El Camino de Santiago atraviesa la localidad en dirección a Lubián entre huertos y prados por un sendero empedrado en el que no falta el agua.
Hedroso, plantado en un terreno escarpado y difícil, os recibirá envuelto en una frondosa naturaleza.
En cuanto a Lubián, la capital, concentra los servicios del municipio. Pueblo de piedra y pizarra enmarcado de vegetación, resulta encomiable el esfuerzo de sus gentes por recuperar las formas constructivas de antaño. En sus proximidades se puede visitar el “curro dos lobos”, construcción que se utilizaba tradicionalmente como trampa para el enemigo ancestral de los ganaderos.
Siguiendo las huellas de la Ruta Jacobea os encontraréis con el Santuario de Nª Señora de la Tuiza, centro de devoción mariana del municipio y cuya romería, a finales de septiembre, convoca a multitud de vecinos de la comarca. Más arriba, Chanos aprovechando una pequeña meseta y finalmente las Hedradas, de cuidada arquitectura. Las portillas de La Canda señalan el límite con Orense no sólo del municipio sino también de Sanabria y la provincia de Zamora.
Por último, no queremos dejar pasar un lugar singular que bien merece una visita: escondido entre montañas, en un promontorio circundado por un meandro del río Tuela, aparece como por encanto el Castro de las Muradellas, misterioso por su ubicación, ya que por un lado se ve flanqueado por una alta montaña y del otro lado por un precipicio sobre el río, lo que no lo convertiría en una posición fácil de defender precisamente; también misterioso su destino ya que, de dimensiones muy reducidas, constaba de una doble muralla y dos campos de piedras hincadas (mucha protección para tan pequeño asentamiento). Y finalmente mágico el paisaje que lo rodea, especialmente el paraje que se extiende a sus pies llamado “A Cova da Mora”, a orillas del Tuela. No dejéis de visitarlo y si dais con las respuestas nos lo contáis.